domingo, 29 de mayo de 2011

La Ascensión Xenófoba



Pasaron los días de vino y rosas.
Los comensales se aferran al plato
cuando en la cazuela escasea el caldo,
y a los invitados, que la cortesía en abundancia servía,
se les raciona el pan y la sal en todas las mesas.

La vieja Europa, anfitriona del evento,
vende las invitaciones para el sustento.
En la cola de las escudillas,
se enzarzan con viejas rencillas
los que ya estaban, con los que vinieron.

El odio echa raíces en los profundos estratos
de la comunidad local, trepando hasta los platos
semivacíos o semillenos de los que no les falta el pan.
Los que fueron invitados, son ahora pordioseros
indignos del mantel ratonado donde se sirve la miseria.

miércoles, 25 de mayo de 2011

La venganza de la Naturaleza







La fuente de la vida, 
la madre que alimenta a sus criaturas con todos sus recursos,
la que llena de aire nuestros pulmones y ofrece sus tesoros a nuestros ojos,
La Naturaleza, a la que sus hijos díscolos no respetan, y le roban los bosques,
le arruinan las aguas y tiznan los aires.
Para demostrar su poder, se agita entristecida y provoca grandes catástrofes,
y ahora los hombres claman y lloran sus pérdidas.
Algunos tan arrogantes, creen que son ellos los que provocan los cambios y que pueden pararlos o mitigarlos. 
Mientras el sol se oscurece por imparables tornados que siembran la desolación en pueblos y ciudades.
Tiembla la tierra y engulle lo que sobre ella los hombres han construido.
Se agita el océano, que por un eufemismo llamamos Pacífico, y sus olas crecen por encima de las casas y las fábricas de luz artificial.
Los volcanes de hielo escupen fuego y sus cenizas nos paralizan.
Grandes ríos se desbordan y sus aguas se ríen de presas y pantanos.
Pero el orgullo de los hombres dice que eso siempre ha pasado y no solo hemos sobrevivido sino que hemos crecido entre las escorias...

lunes, 23 de mayo de 2011

El regocijo de los vencedores.




Alzan sus manos por encima de sus oídos sordos
con el enemigo humillado
bebiendo su derrota a sorbos.
Esbozando sus sonrisas burlonas
se pasean hidalgos y amazonas
entre los restos de la batalla
donde no alcanza la metralla.
Ajenos al clamor de los heridos
no se dan por aludidos
en su arrogancia embutidos
del rumor que ya no aguanta
y se rompe la garganta
entre Sancho y don Quijote
con un grito “No les votes”

jueves, 19 de mayo de 2011

Delirios y rosas


Esto es América !
No la enfermedad de la gran ciudad que hace hablar a solas a la gente en humeantes calles,
no la del sexo rápido, y comida con antioxidantes, edulcorantes y adulterantes autorizados.
no la del martillo y el túnel, la del vecino desconocido, la de los nichos verticales y el neón intermitente.
Es la América residencial, de la hamaca en el porche esperando ver crecer la hierba, la del encargado de la gasolinera con la mano de visera oteando la desierta carretera, la del sonido lejano, la del polvo urbano.
la de las noches en vela bajo un millón de estrellas, la de los vientos desaforados y ríos desbordados.
La que espera a las rosas con paciencia infinita, la de la malaventura que se cierne en cada ocaso.
Esto es América.

martes, 17 de mayo de 2011

La música de fondo





Suena una balada muda,
las llamas de las velas bailan suavemente al compás de las sombras que producen.
Todo parece más hermoso entre las notas largas,
como si la paz, al fin, hubiese entrado de puntillas
en este momento azul del día,
entre el áspero granito de la luz de cuarzo y el desasosiego de la almohada.
Cuando puedes prescindir de lo imprescindible y el tiempo es ajeno a los relojes.
Es solo un momento difuminado en sus extremos, algo que te llena y te vacía,
una ola de suavidad eterna mecida por la música que no habla y suena.
Los ojos abiertos solo indican que estas despierto,
No tiene nombre, ni forma, es un  aliento, una sima, una flor en un volcán
que te dice que estas vivo.

domingo, 15 de mayo de 2011

Los frutos de la duda



Primero sembraron el miedo para recoger una cosecha de desolación.
Pero el miedo se convirtió en desconfianza. 
Y las dudas dieron sus frutos.
Ya nadie se cree nada.
 Las noticias cabalgan contradictorias por campos yermos de fe y confianza, ante el escepticismo general.
Incluso se llega a dudar del asesinato del "peligro público número uno" . Mientras, de la noche a la mañana, el stock inmobiliario que crecía día a día, ahora parece quedarse sin oferta. El caos bursátil que  anunciaban se convierte en escandalosos beneficios y el violador de camareras es violado por un complot político que le ve como un peligro electoral inminente.
Los verdugos son las víctimas, y sus heraldos noticiosos nunca mienten aunque sean contradictorios.
El Apocalipsis es el séptimo cielo.
Se empujan violentamente para  caber todos en el escenario electoral, tan ocupados por representar su trágica parodia que no se dan cuenta de que el teatro se va quedando vacío, y que ya nadie aplaude en el patio de butacas.





martes, 10 de mayo de 2011

El secreto de la felicidad.




He visto a buenos profesionales tristes, a gente religiosa aburrida, ejecutivos desesperados y gentes de toda condición alienados, sumisos, aceptando una realidad que nunca quisieron.
He visto los ojos vacíos en los transportes públicos, en las consultas, ojos sin alma y sin aliento.
He visto sufrir de amor correspondido y llorar por lo que se ha perdido.
No es que quiera ver la tristeza, todo lo contrario, busco un brote de alegría en la maraña que me rodea, pero no negaré lo que tengo delante.
Una vez vi unos jóvenes riendo y cantando, bailaban sin música y parecían felices, pero estaban borrachos o drogados.
Una anciana me saludó con una sonrisa, estaba sentada en una piedra blanca, como quien contempla el paso de la vida, todo era dulzura en su expresión, como si conociera el secreto de la felicidad después de tantos años vividos. Vi que alguien enjuto de ceño fruncido y pelo hirsuto hacía por ayudarla a levantarse y en su actitud comprendí que se le daba el trato como a los que han perdido la cabeza.
Quizás fuese una anciana enferma de felicidad.

lunes, 9 de mayo de 2011

Los Huérfanos

Los huérfanos.

Estamos huérfanos, obligados a decidir nuestro futuro, sin nadie a quien echar la culpa de nuestras desgracias. La clase política ya no nos representa, solo mira por su estatus, distribuyendo la riqueza entre los que menos la necesitan o en el peor de los casos pagando antiguos favores. Son tiempos peligrosos de falsos mesías que pregonan sus falsos programas a sabiendas que solo son un cortina de humo para ocultar sus ambiciones secretas.
La desconfianza de los huérfanos se transforma en la ira de los justos. Algunos confundidos intentarán adoptar un padre que les diga como deben comportarse, otros buscarán un líder en la basura donde abundan, y no faltarán los que necesiten un nuevo Dios o un guía espiritual que les enseñe a ser felices.
Es tiempo de elecciones, de campaña y de batalla. Tiempos de resucitar viejas canciones, como aquella titulada “A beneficio de los huérfanos y los pobres de la capital”
cuya letra decía algo así:

Las tarjetas de canto dorado
anunciaban que
la marquesa iba a dar una fiesta
de gala.
y tan caritativa
y siempre tan cristiana
la iba a dar
A beneficio de los huérfanos,
y de los pobres de la capital

El señor embajador,
hablaba con la marquesa
que engullía con presteza,
sandwichs de jamón de york.
Y la de Floró mayor,
hijastra de una ex princesa
husmeaba las bandejas
detrás de un whisky on the Rocks
Pero las husmeaba...

A beneficio de los huérfanos,
y de los pobres de la capital.

Y la de Floró menor,
de antepasados gloriosos,
flirteaba sin reposo,
en ausencia de su esposo,
con un joven parecido
a Rodolfo Valentino.
con un algo de cretino
y un algo de gigoló.
Pero filtreaba…

A beneficio de los huérfanos,
y de los pobres de la capital

El duque don Baldomero
vomitaba con esmero
encima de un camarero
las huevas del esturión
Y el marqués de Estropajera
de una forma harto grosera
pellizcó a una camarera
sin ninguna precaución.
Pero la pellizcaba...

A beneficio de los huérfanos,
y de los pobres de la capital.

A las 10 de la mañana
los huérfanos trabajaban.
Y los pobres mendigaban.
Los invitados... RONCABAN
Pero roncaban...

A beneficio de los huérfanos,
y de los pobres de la capital.

domingo, 8 de mayo de 2011

Vivir con menos


Nos hemos acostumbrado a la abundancia, a tenerlo todo al alcance de la mano y ahora nos cuesta mucho más adaptarnos a las nuevas circunstancias creadas por la recesión.
Cuando se alcanza cierta calidad de vida, de servicios públicos, resulta muy duro bajar un peldaño en la escalera de la comodidad.
Los trabajadores de France Telécome ... antes funcionarios ... se suicidan o entran en depresiones producidas por el cambio de estatus de la empresa, los parados españoles pierden la esperanza y los jóvenes no ven futuro, porque hemos relegado la felicidad a un segundo plano y nos hemos equivocado.
Se puede vivir con menos sin volver atrás, cuando no se poseían tantas cosas y tampoco se necesitaban para ser alegres y sentirse un poco más felices.
Solo un cambio de mentalidad nos sacará de esta triste realidad que entorno nuestro hemos creado.
Solo nos salva la Belleza, el culto a la belleza que hemos sustituido por el culto al dinero.
Todavía la naturaleza nos obsequia con sus maravillas de forma gratuita, pero nos empeñamos en alejarla de nuestras vidas, construyendo nuevas jaulas de titanio y hormigón.
No hay a la vista grandes soluciones colectivas, pero si cambiamos la perspectiva individual, el mundo cambiará con nosotros.